Colapso
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Anoche, una nueva muestra de irregularidad. Se pierde ante un equipo que se identifica plenamente con la mala intención y que se encontró con cuatro regalos del Verdiblanco. Aprovecharon las oportunidades, al fin y al cabo, qué culpa tienen de que se les entregue el partido en bandeja de plata.
El peor rival del Cali en los últimos años, es el Deportivo Cali. Si la pelea es contra uno mismo, el progreso nunca se va a ver. Los sindicatos, las malas contrataciones, la desidia del Comité Directivo, entre otros, han herido de muerte al Glorioso. El sistema institucional actual del equipo colapsó. Cualquier cosa que se haga desde la Junta Directiva o Cuerpo Técnico fracasa. Nada sale bien. Habrá que pensar en una reingeniería total, posiblemente con otros miembros que tengan por lo menos algo de espacio para maniobrar. Con lo que hay es imposible salir adelante.
Realmente es una tristeza lo que pasa con Ricardo Martínez. Su proceso está agonizante, casi muerto. Al pensar en el técnico como ser humano, no puede producir sino pesar que una persona que le ha dedicado toda la vida al Cali, termine de esta forma. Martínez se arriesgó a tomarlo en un momento difícil y está fracasando rotundamente. Para los hinchas del Cali será el chivo expiatorio y quedará marcado para siempre como un mal técnico. Será muy difícil para él, recuperar la labor de 20 años. Un fracaso personal que nadie quisiera vivir.
Particularmente Martínez comete dos errores graves. El primero, dejarse llevar por la presión de la hinchada y de la prensa. Los fanáticos pedían un equipo "arrollador y ofensivo" con 11 delanteros, a lo que se hizo caso sin pensar en las consecuencias. El segundo, es el error de cada técnico que ha pasado en el Cali desde hace 2 años, la selección de los jugadores. Está más que comprobado que hay ciertos elementos en el Cali que no están para la nómina principal. Por más carisma, cariño, apego, subjetividad o como quiera llamarse, hasta los fans más radicales de ciertos jugadores tienen que aceptar que los errores individuales están costando demasiado. Si no es Benítez, es Ramírez; si no es Ramírez, es el Churta; si no es el Churta, es Briceño; si no es Briceño, es Belalcázar. Demasiados futbolistas que producen inseguridad y que en cualquier momento conducen a una jugada adversa. Martínez decidió jugar con ellos, arriesgarse a que no iban a cometer más yerros, confiando demasiado en aquellos que fecha a fecha decepcionan en lo futbolístico.
Cada vez es más aburrido hablar y escribir sobre el equipo amado. Este espacio le ha dedicado mucho tiempo a ofrecer soluciones, a buscar salidas, algunas veces con buenos elementos de juicio, otras veces no tantos. Siempre procurando el bien del equipo y su progreso. Hoy por hoy no hay mucho más que agregar. Si la turba enardecida piensa que quemando a Martínez y trayendo al Cheché o a Pinto las cosas van a cambiar, que lo hagan; si piensan todavía que ciertos jugadores, que aunque fecha a fecha cometen errores y a pesar de las múltiples oportunidades que se les dan nunca cambian y reinciden, merecen defensa a ultranza, que lo hagan. La Junta actual nos ha llevado a un caos totalmente desconocido para la historia del Cali y es muy difícil centrar a toda una fanaticada atizada por la prensa "delincuencial" a que pare y piense en la solución de fondo y no en la coyuntural. Sería una pelea totalmente perdida para el blog.
Del partido, muy poco que decir. El equipo se planta bien, domina hasta el error por izquierda de Briceño. Penalti, cobra González, Ramírez se tira mal otra vez y gol. El Cali busca el empate y ahora es Churta Hurtado quien ataja un cambio de frente rojo pero lo hace enviando un ladrillo hacia la mitad del campo que Kennedy no puede controlar, Parra la agarra y anota el segundo. El tercero llega en otra jugada por derecha, Ramos supera sin problema a Churta, centra y Valdés rechaza débil y ante la pasividad de Briceño y Hurtado, el delantero rojo anota un gol que no volverá a hacer en el resto de su carrera deportiva. Se acaba el primer tiempo.
Para el segundo se venía la tromba verdiblanca, pronto el Cali anota el descuento por intermedio de Fredy Montero ante pase de Carrillo. El empate era posible porque el rival no mostraba nada en la cancha aparte de la buena suerte. Sin embargo, Briceño vuelve a sus andanzas y se hace expulsar al cometer una falta descalificadora. No se entiende ni para qué protesta. Ahí ya todo acababa para el Cali. Los rojos por su parte apretaron un poco y convirtieron el cuarto ante una zaga completamente dormida. El quinto también hizo parte de la humillación pero el línea lo anuló injustamente. Pudieron ser 7 u 8 con facilidad.
La eliminación de la Mustang II/2008 está a la orden del día. Puede que con un técnico nuevo se logre el milagro tal como ocurrió en 1998 y 2005 en los que por pura casualidad funcionaron los nuevos adiestradores y el equipo de la nada salió campeón. Eso está dentro de las posibilidades. Como también lo está el fracaso. Lo cierto del caso es que cambiando de técnico no se cura el cáncer que carcome al equipo.
Ojalá la hinchada del Cali siguiera asistiendo al estadio, ya ni para ver al equipo porque no hay mucho que ver si los mismos protagonistas siguen en la cancha, sino para aportar su granito de arena en la crisis. Lo deportivo ya pasó a segundo plano, aquí lo que importa es la institución, que no se vaya a caer en una crisis irreversible. El daño ya está hecho, el blog ya hizo su trabajo con ideas constructivas, no queda de otra que aguantar, esperar un cambio de suertes, porque a la vista se perciben otros 22 años de sufrimiento.
Temas propuestos:
1. ¿Cambiando de técnico se solucionan todos los problemas del Cali? (again)
2. En su opinión, ¿los jugadores que recurren en tantos errores individuales deben tener más oportunidades en el equipo? Es decir, ¿jugadores que cometan tantos errores son elementos para un equipo grande como el Cali? ¿Cuáles son los jugadores que más errores cometen en el equipo titular?
3. ¿Qué es lo que más les aburre de la actualidad Verdiblanca? Técnico, junta, jugadores, irregularidad, todos, etc.
4. Impresiones generales sobre el exclásico.
Obelisco
El peor rival del Cali en los últimos años, es el Deportivo Cali. Si la pelea es contra uno mismo, el progreso nunca se va a ver. Los sindicatos, las malas contrataciones, la desidia del Comité Directivo, entre otros, han herido de muerte al Glorioso. El sistema institucional actual del equipo colapsó. Cualquier cosa que se haga desde la Junta Directiva o Cuerpo Técnico fracasa. Nada sale bien. Habrá que pensar en una reingeniería total, posiblemente con otros miembros que tengan por lo menos algo de espacio para maniobrar. Con lo que hay es imposible salir adelante.
Realmente es una tristeza lo que pasa con Ricardo Martínez. Su proceso está agonizante, casi muerto. Al pensar en el técnico como ser humano, no puede producir sino pesar que una persona que le ha dedicado toda la vida al Cali, termine de esta forma. Martínez se arriesgó a tomarlo en un momento difícil y está fracasando rotundamente. Para los hinchas del Cali será el chivo expiatorio y quedará marcado para siempre como un mal técnico. Será muy difícil para él, recuperar la labor de 20 años. Un fracaso personal que nadie quisiera vivir.
Particularmente Martínez comete dos errores graves. El primero, dejarse llevar por la presión de la hinchada y de la prensa. Los fanáticos pedían un equipo "arrollador y ofensivo" con 11 delanteros, a lo que se hizo caso sin pensar en las consecuencias. El segundo, es el error de cada técnico que ha pasado en el Cali desde hace 2 años, la selección de los jugadores. Está más que comprobado que hay ciertos elementos en el Cali que no están para la nómina principal. Por más carisma, cariño, apego, subjetividad o como quiera llamarse, hasta los fans más radicales de ciertos jugadores tienen que aceptar que los errores individuales están costando demasiado. Si no es Benítez, es Ramírez; si no es Ramírez, es el Churta; si no es el Churta, es Briceño; si no es Briceño, es Belalcázar. Demasiados futbolistas que producen inseguridad y que en cualquier momento conducen a una jugada adversa. Martínez decidió jugar con ellos, arriesgarse a que no iban a cometer más yerros, confiando demasiado en aquellos que fecha a fecha decepcionan en lo futbolístico.
Cada vez es más aburrido hablar y escribir sobre el equipo amado. Este espacio le ha dedicado mucho tiempo a ofrecer soluciones, a buscar salidas, algunas veces con buenos elementos de juicio, otras veces no tantos. Siempre procurando el bien del equipo y su progreso. Hoy por hoy no hay mucho más que agregar. Si la turba enardecida piensa que quemando a Martínez y trayendo al Cheché o a Pinto las cosas van a cambiar, que lo hagan; si piensan todavía que ciertos jugadores, que aunque fecha a fecha cometen errores y a pesar de las múltiples oportunidades que se les dan nunca cambian y reinciden, merecen defensa a ultranza, que lo hagan. La Junta actual nos ha llevado a un caos totalmente desconocido para la historia del Cali y es muy difícil centrar a toda una fanaticada atizada por la prensa "delincuencial" a que pare y piense en la solución de fondo y no en la coyuntural. Sería una pelea totalmente perdida para el blog.
Del partido, muy poco que decir. El equipo se planta bien, domina hasta el error por izquierda de Briceño. Penalti, cobra González, Ramírez se tira mal otra vez y gol. El Cali busca el empate y ahora es Churta Hurtado quien ataja un cambio de frente rojo pero lo hace enviando un ladrillo hacia la mitad del campo que Kennedy no puede controlar, Parra la agarra y anota el segundo. El tercero llega en otra jugada por derecha, Ramos supera sin problema a Churta, centra y Valdés rechaza débil y ante la pasividad de Briceño y Hurtado, el delantero rojo anota un gol que no volverá a hacer en el resto de su carrera deportiva. Se acaba el primer tiempo.
Para el segundo se venía la tromba verdiblanca, pronto el Cali anota el descuento por intermedio de Fredy Montero ante pase de Carrillo. El empate era posible porque el rival no mostraba nada en la cancha aparte de la buena suerte. Sin embargo, Briceño vuelve a sus andanzas y se hace expulsar al cometer una falta descalificadora. No se entiende ni para qué protesta. Ahí ya todo acababa para el Cali. Los rojos por su parte apretaron un poco y convirtieron el cuarto ante una zaga completamente dormida. El quinto también hizo parte de la humillación pero el línea lo anuló injustamente. Pudieron ser 7 u 8 con facilidad.
La eliminación de la Mustang II/2008 está a la orden del día. Puede que con un técnico nuevo se logre el milagro tal como ocurrió en 1998 y 2005 en los que por pura casualidad funcionaron los nuevos adiestradores y el equipo de la nada salió campeón. Eso está dentro de las posibilidades. Como también lo está el fracaso. Lo cierto del caso es que cambiando de técnico no se cura el cáncer que carcome al equipo.
Ojalá la hinchada del Cali siguiera asistiendo al estadio, ya ni para ver al equipo porque no hay mucho que ver si los mismos protagonistas siguen en la cancha, sino para aportar su granito de arena en la crisis. Lo deportivo ya pasó a segundo plano, aquí lo que importa es la institución, que no se vaya a caer en una crisis irreversible. El daño ya está hecho, el blog ya hizo su trabajo con ideas constructivas, no queda de otra que aguantar, esperar un cambio de suertes, porque a la vista se perciben otros 22 años de sufrimiento.
Temas propuestos:
1. ¿Cambiando de técnico se solucionan todos los problemas del Cali? (again)
2. En su opinión, ¿los jugadores que recurren en tantos errores individuales deben tener más oportunidades en el equipo? Es decir, ¿jugadores que cometan tantos errores son elementos para un equipo grande como el Cali? ¿Cuáles son los jugadores que más errores cometen en el equipo titular?
3. ¿Qué es lo que más les aburre de la actualidad Verdiblanca? Técnico, junta, jugadores, irregularidad, todos, etc.
4. Impresiones generales sobre el exclásico.
Obelisco
Etiquetas: crisis, delincuencia, deportivo cali, exclásico, ricardo martínez
publicado por Obelisco @ 5:53 a. m.
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