Responsabilidad histórica (previa)
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Es cierto, el clásico histórico del fútbol colombiano ya no es el mismo de antes. La crisis deportiva de la Amenaza Verde y la institucional, dirigencial, nominal, económica y deportiva del Millonarios ya no hace tan llamativo este encuentro de un grande contra otro que no lo es desde la caída de Gonzalo Rodríguez Gacha.
Sin embargo, el Cali tiene una responsabilidad con su hinchada y es mantener la histórica paternidad que en enfrentamientos directos existe con el embajador. Se ha dicho en múltiples oportunidades que el Millonarios es aquel que mide qué tan mal está el Cali, porque lo normal es que el Cali los paseé en el Pascual, en el Campín o en cualquier otro estadio del mundo que se conozca. Cuando el Glorioso pierde con el azul, sólo puede significar que la crisis es inmensa y que el futuro es demasiado oscuro. La última vez que se perdió con el equipo del Chiqui, el Cali no clasificó a los cuadrangulares.
El semestre pasado, jugando un fútbol perverso, se sacó un resultado favorable en el estadio de la 57. Este año no se comenzó bien y el funcionamiento no convence, pero no es tan malo como el de hace 6 meses. El Millonarios tampoco viene bien. Hizo el ridículo el sábado pasado en su propio terruño frente a un DIM temeroso que estaba con 10. Carreño debe saber (y si no lo sabe que se lo digan de una vez) que el Cali no puede de ninguna manera ceder puntos contra el azul en el Pascual. Un resultado adverso es crítico. Aquí hay que ganar sí o sí.
Desafortunadamente para los hinchas, Carreño se decidió por un 3-4-1-2, el mismo que intentó implementar Labruna en una época para olvidar. La diferencia, Carreño hizo el análisis correspondiente del FPC y lo identificó como un esquema ganador para el torneo. En la primera fecha no le fue bien y el esquema no parece tener esperanzas de triunfo con los actuales elementos que conforman la defensa. Los cambios no se hicieron esperar.
La aparición de Óscar Córdoba brinda mayor experiencia en la zaga. Será el encargado de ordenar la defensa, porque Espínola no dió muestras de liderazgo. Zapata está lesionado, y se aprovecha la oportunidad para que un sub-19 tome su puesto, Germán Mera. En la zona medular Juan Guillermo Domínguez cambiará al extremo izquierdo (posición que no le conviene) y debutará con el equipo el uruguayo Javier Delgado. En la ofensiva, Milton volverá a hacer pareja con Montero, ante la ausencia de Herman Córdoba que fue convocado a la selección sub-20. Donald Millán tiene la confianza del uruguayo para ser el conductor del equipo.
En el Millonarios de Vanemerack lo que hay es polenta, porque de táctica no hay nada. Increíblemente el técnico del azul ha aceptado ante los medios que es un "técnico de colegio". Formará con un 4-3-1-2. El fuerte de Millonarios es su medio campo. Los volantes, en su mayoría, saben con el balón y tienen buen retorno. Jonathan Estrada es punzante por la izquierda y además tiene marca. A Robayo lo define la dinámica y el pundonor; Andrés Pérez quita bien y aporta experiencia. El alma del equipo es Ricardo Ciciliano, uno de los jugadores favoritos del segundo piso. Tiene velocidad, pase al vacío, balón parado y gol. Seguramente hará parte de la titular mañana viernes. Arriba debutará el hijo de Vanemerack por sub-19; algo le tuvieron que aprender al Chiqui esos dos. No durará mucho en el campo, y será sustituido por Cochas para abrir la cancha por la derecha y ubicar a Ciciliano de media punta. El otro delantero es Martín García, que no mete miedo.
Lo grave es la defensa. Trataron de reforzar con Roberto Carlos Cortés, porque las canteras azules no dan nada mejor que Álex Díaz. Los centrales son Asprilla y Mosquera, no brindan ya las garantías de otras épocas. Por derecha un tal Salinas.
Más grave aún es el funciomiento de sus líneas. Es un equipo larguísimo. No hay cohesión entre líneas y menos de la referencia a las zonas o al jugador. Millonarios deja muchos espacios para jugar y no es contundente en el área. Por eso le funcionó tan bien la estrategia del contragolpe al DIM, pero el Cali no puede salir a aplicar lo mismo de local.
Para ganar hay que, primero, cambiar del esquema de 3 al de 4 en el fondo, pero eso no va a pasar. Entonces le tiene que meter velocidad a la delantera, pero la velocidad está lesionada o en la selección sub-20. El plan C radica entonces en el aprovechamiento de la espalda de los laterales y de la lentitud de los centrales con pases entre líneas y toques de primera. La oportunidad de ver a Millán en toda su dimensión. La media distancia será vital y el encargado es Juan Guillermo Domínguez. Es claro que los volantes laterales del Cali y los de primera línea tienen necesariamente que correr. Si se le da el balón a Millonarios por ahí de pronto pueden embocarla, se envalentonan y después no les gana nadie. Cochas, Ciciliano y Estrada son generadores de juego y la zaga tiene que concentrarse en los movimientos y diagonales de estos volantes, enfocados y corriendo. En el tres de atrás sólo queda rezar y esperar el milagro: que Espínola se vuelva rápido, que Arrechea se vuelva técnico y que Mera sea el próximo Mario Alberto Yepes.
Será un partido entretenido, de dos equipos con necesidad de ganar los puntos y la aprobación de la hinchada. Ambos tienen un funcionamiento pobrísimo, pero el Cali tiene la ventaja porque contrató a un técnico conocedor, Millonarios no. Carreño no se puede dejar ganar el duelo de un técnico de colegio.
Probables formaciones:
Deportivo Cali: Ó Córdoba; Arrechea, Espínola y Mera (sub-19); Hurtado, Ayala, Delgado y Domínguez; Millán; Milton y Montero.
Millonarios: Blandón; Salinas, Asprilla, Mosquera y Cortes; Pérez, Robayo y Estrada; Ciciliano; Vanemerack (sub-19) y García.
Temas
1. ¿Qué mejoría se puede prever por los cambios en la nómina del Cali?
2. ¿Es el Millonarios un rival que puede medir el funcionamiento del Superdépor?
3. ¿Funcionará la dupla Milton-Montero esta vez?
4. Nómina y claves para la victoria.
Obelisco
PS: El plazo para entregar el Caligol se vence el viernes 8 de febrero a las 6pm hora de Colombia. Por favor no se les olvide.
Sin embargo, el Cali tiene una responsabilidad con su hinchada y es mantener la histórica paternidad que en enfrentamientos directos existe con el embajador. Se ha dicho en múltiples oportunidades que el Millonarios es aquel que mide qué tan mal está el Cali, porque lo normal es que el Cali los paseé en el Pascual, en el Campín o en cualquier otro estadio del mundo que se conozca. Cuando el Glorioso pierde con el azul, sólo puede significar que la crisis es inmensa y que el futuro es demasiado oscuro. La última vez que se perdió con el equipo del Chiqui, el Cali no clasificó a los cuadrangulares.
El semestre pasado, jugando un fútbol perverso, se sacó un resultado favorable en el estadio de la 57. Este año no se comenzó bien y el funcionamiento no convence, pero no es tan malo como el de hace 6 meses. El Millonarios tampoco viene bien. Hizo el ridículo el sábado pasado en su propio terruño frente a un DIM temeroso que estaba con 10. Carreño debe saber (y si no lo sabe que se lo digan de una vez) que el Cali no puede de ninguna manera ceder puntos contra el azul en el Pascual. Un resultado adverso es crítico. Aquí hay que ganar sí o sí.
Desafortunadamente para los hinchas, Carreño se decidió por un 3-4-1-2, el mismo que intentó implementar Labruna en una época para olvidar. La diferencia, Carreño hizo el análisis correspondiente del FPC y lo identificó como un esquema ganador para el torneo. En la primera fecha no le fue bien y el esquema no parece tener esperanzas de triunfo con los actuales elementos que conforman la defensa. Los cambios no se hicieron esperar.
La aparición de Óscar Córdoba brinda mayor experiencia en la zaga. Será el encargado de ordenar la defensa, porque Espínola no dió muestras de liderazgo. Zapata está lesionado, y se aprovecha la oportunidad para que un sub-19 tome su puesto, Germán Mera. En la zona medular Juan Guillermo Domínguez cambiará al extremo izquierdo (posición que no le conviene) y debutará con el equipo el uruguayo Javier Delgado. En la ofensiva, Milton volverá a hacer pareja con Montero, ante la ausencia de Herman Córdoba que fue convocado a la selección sub-20. Donald Millán tiene la confianza del uruguayo para ser el conductor del equipo.
En el Millonarios de Vanemerack lo que hay es polenta, porque de táctica no hay nada. Increíblemente el técnico del azul ha aceptado ante los medios que es un "técnico de colegio". Formará con un 4-3-1-2. El fuerte de Millonarios es su medio campo. Los volantes, en su mayoría, saben con el balón y tienen buen retorno. Jonathan Estrada es punzante por la izquierda y además tiene marca. A Robayo lo define la dinámica y el pundonor; Andrés Pérez quita bien y aporta experiencia. El alma del equipo es Ricardo Ciciliano, uno de los jugadores favoritos del segundo piso. Tiene velocidad, pase al vacío, balón parado y gol. Seguramente hará parte de la titular mañana viernes. Arriba debutará el hijo de Vanemerack por sub-19; algo le tuvieron que aprender al Chiqui esos dos. No durará mucho en el campo, y será sustituido por Cochas para abrir la cancha por la derecha y ubicar a Ciciliano de media punta. El otro delantero es Martín García, que no mete miedo.
Lo grave es la defensa. Trataron de reforzar con Roberto Carlos Cortés, porque las canteras azules no dan nada mejor que Álex Díaz. Los centrales son Asprilla y Mosquera, no brindan ya las garantías de otras épocas. Por derecha un tal Salinas.
Más grave aún es el funciomiento de sus líneas. Es un equipo larguísimo. No hay cohesión entre líneas y menos de la referencia a las zonas o al jugador. Millonarios deja muchos espacios para jugar y no es contundente en el área. Por eso le funcionó tan bien la estrategia del contragolpe al DIM, pero el Cali no puede salir a aplicar lo mismo de local.
Para ganar hay que, primero, cambiar del esquema de 3 al de 4 en el fondo, pero eso no va a pasar. Entonces le tiene que meter velocidad a la delantera, pero la velocidad está lesionada o en la selección sub-20. El plan C radica entonces en el aprovechamiento de la espalda de los laterales y de la lentitud de los centrales con pases entre líneas y toques de primera. La oportunidad de ver a Millán en toda su dimensión. La media distancia será vital y el encargado es Juan Guillermo Domínguez. Es claro que los volantes laterales del Cali y los de primera línea tienen necesariamente que correr. Si se le da el balón a Millonarios por ahí de pronto pueden embocarla, se envalentonan y después no les gana nadie. Cochas, Ciciliano y Estrada son generadores de juego y la zaga tiene que concentrarse en los movimientos y diagonales de estos volantes, enfocados y corriendo. En el tres de atrás sólo queda rezar y esperar el milagro: que Espínola se vuelva rápido, que Arrechea se vuelva técnico y que Mera sea el próximo Mario Alberto Yepes.
Será un partido entretenido, de dos equipos con necesidad de ganar los puntos y la aprobación de la hinchada. Ambos tienen un funcionamiento pobrísimo, pero el Cali tiene la ventaja porque contrató a un técnico conocedor, Millonarios no. Carreño no se puede dejar ganar el duelo de un técnico de colegio.
Probables formaciones:
Deportivo Cali: Ó Córdoba; Arrechea, Espínola y Mera (sub-19); Hurtado, Ayala, Delgado y Domínguez; Millán; Milton y Montero.
Millonarios: Blandón; Salinas, Asprilla, Mosquera y Cortes; Pérez, Robayo y Estrada; Ciciliano; Vanemerack (sub-19) y García.
Temas
1. ¿Qué mejoría se puede prever por los cambios en la nómina del Cali?
2. ¿Es el Millonarios un rival que puede medir el funcionamiento del Superdépor?
3. ¿Funcionará la dupla Milton-Montero esta vez?
4. Nómina y claves para la victoria.
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PS: El plazo para entregar el Caligol se vence el viernes 8 de febrero a las 6pm hora de Colombia. Por favor no se les olvide.
Etiquetas: deportivo cali, german mera, javier delgado, millonarios, previa
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