¿Cómo vamos a ganar en Pasto?

Cordial saludo:

Todo lo que pasó ayer corrobora lo que vengo diciendo desde hace tiempo: el fútbol hoy por hoy es táctica y disciplina. El Deportivo Pasto con mentalidad de equipo grande salió ayer a aplicar lo que le ha servido en los últimos partidos, y lo que lo llevó a clasificarse a la final. La doble línea de cuatro, es una táctica defensiva que cada vez más se está utilizando en el mundo. Ayer mientras veía el partido recordé otros dos encuentros que me marcaron: FC Barcelona vs. Juventus en una semifinal de Champions hace unos años, y Deportivo Cali vs. Nacional de Montevideo en una Copa Libertadores de hace ya como 10 años. En el primero el Barcelona hizo todo bien, abrió las bandas, puso centros, nunca intentó por el medio, manejó el partido, pero en el último minuto en un contragolpe, Zalayeta, el Uruguayo, les metió el gol que los sacó de carrera. El otro, con la memoria de Recoba anotando un gol de tiro libre en los últimos minutos del partido, cuando Nacional no jugaba a nada y el Cali estaba apretado por los puntos en la tabla. Muchas veces no se puede. Ayer Pasto tuvo suerte, y el Cali no. El Pasto tuvo su oportunidad de gol y la metió. Nosotros desperdiciamos un penalty y otras ocasiones de gol. Pasto ganó bien, por su mentalidad y ese excelente técnico, Quintabani.

Entrando en el partido, Cali arranca con Domínguez por la franja izquierda para hacer dupleta con Benítez, Tapia queda libre en el medio. El partido arranca bien, pero rápidamente Quintabani bloquea la salida de Benítez y Domínguez queda solo. Tapia no tiene todavía la experiencia para echarse el equipo al hombro y el Cali se pierde en medio de la defensa y presión del Pasto. Además de esto Carrillo y Pérez no podían tener un balón, no les llegaba, y cuando por fin la tenían la perdían muy rápido o se tiraban al piso buscando una falta. El partido fue un monólogo del Cali metiendo centros sin peligro al arco de Barahona (la figura del partido), porque los laterales simplemente nunca llegaban a la línea final. Sin duda este era el juego perfecto para que Benítez se luciera, no tenía que marcar a nadie y podía irse en la ofensiva sin restricción, porque en el segundo tiempo después del gol ya el Pasto estaba todo atrás. Pero es un jugador limitadísimo que nunca ganó la línea final. Sin embargo se le reconocen las ganas. Hurtado por el otro lado fue más claro, pero tenía más responsabilidad en defensa. Rivas y Caballero fallaron en las opciones de peligro. Gravísimo. El gol de Pasto viene de un error del que menos se pensaba. Caballero deja rebotar un balón que lo sobrepasa y que define Villagra con gran criterio, única acción de juego en la que estuvo aparte de la falta que le hizo a Domínguez desde atrás (y que merecía la roja).

Siendo una persona de cábalas, no me gustó ver a Carrillo con ese nuevo peluqueado, para mi, eso siempre ha representado muy mala suerte. Además muestra que los jugadores estaban confiados. Tampoco me gusta que jugadores potentes cobren las penas máximas en momentos definitivos. Era predecible que Pérez errara el penalty. Él, como dicen los periodistas, NO es un especialista para los cobros desde los 12 pasos.

Para mi esta final se definirá en los tiros desde el punto penal. Ayer vimos cómo se le puede jugar a un grande. Estoy seguro que si la final era contra Nacional o Millonarios, el juego iba a ser más abierto, porque estos equipos tienen otras responsabilidades con su hinchada. Estos son los equipos llamados a jugar bien y a dar espectáculo. El Deportivo Pasto no, quiere ser grande y acumular títulos. Por esto mismo sé que no le va a dar pena a Quintabani poner doble línea de 4 en Pasto y jugar al contraataque. Quintabani quiere su título y lo ve muy cerca, y sabe que si sale a jugarle al Cali, pierde esa chance.

Entonces, les pregunto a quienes se tomaron la molestia de leer mi análisis: ¿Qué tiene que hacer Sarmiento para romper esa doble línea? ¿Qué tiene que hacer el Cali para ganar la novena estrella?

PS: El blog del Cali en El Tiempo está insufrible hoy con tanto metido oportunista, además no alcanzaban los 1000 caracteres para lo que tenía que decir. Esto es temporal, pero agradecería sus comentarios, que siempre han sido inteligentes, cultos y acertados. Después del partido de Brasil estaré de vuelta.

Atentamente,

Obelisco